ante la duda abstente...

Hace mucho que no compartia un fin de semana (a cabalidad) con mi viejo,tanto por motivación como por ocasión.

Mi viejo es un tipo re-especial (es genético) tiene la típica actitud de verdad absoluta,pero abierto a la discusión,sin embargo no cede por nada del mundo.

Arbitro profesional hasta 1994,pero pelotero de por vida,mi papá me heredó el amor por la de cuero,el rock,las películas e indirectamente el hábito de escribir(indirectamente ya que eso solapaba de alguna manera la nula capacidad matemática que quería ver en mí)

Hay una máxima del referato que mi padre ha aplicado a su vida y por esporulacion a la mía.Esa ley ha condicionado (de buena o mala manera) lo que ha pasado por mi vereda,mal que mal es un juego de posibilidades v/s tincadas,osea es lo que puede ser y lo que me "tinca" que puede ser.

Soy un ser lleno de dudas lo admito,pero no así de abstenciones,pero el método antes mencionado me ha dado grandes cuotas de aprendizaje ensayo/error (+ error que ensayo),y ante cualquier vacilación la cara de mi viejo aparece cual Mufasa entre las nubes para mostrarme el camino.A pesar de toda esta descripción disneyliana, aveces nos llevamos como el perro y el gato(bueno muchas veces),las peleas esperan cualquier chispa para realizar su pega, será acaso la igualdad de polos,o simplemente por que sí.

A mi viejo lo quiero,pero este tiempo me ha ayudado a darme cuenta que hay relaciones que se basan en la distancia para mejorar,es cosa de echarse de menos un poco para disfrutar los momentos en que coincidimos,creo que me costó aceptar esto pero es una realidad,una realidad que no cabe duda ni abstención.